Propiedad y financiamiento
San Juan se caracteriza, como la mayoría de las provincias argentinas, por un ecosistema mediático mayormente privado y comercial. En él conviven empresas de mayor trayectoria o tradición de marca, con otras de menor tamaño. Las primeras están presentes tanto en soportes tradicionales (prensa y televisión fundamentalmente) como en internet; las segundas, en su gran mayoría sólo están presentes en línea. Los “nativos digitales” son mayoría en número de emprendimientos y compiten por la economía de la atención de diversos públicos y por una porción de la pauta oficial. Según relevamientos del proyecto “Mapa de Medios Digitales de San Juan”, realizados entre 2020 y 2022, existen en esta provincia entre 90 y 110 medios digitales activos, nativos o no. La cantidad depende del momento en que se hizo el registro y la variación en número se debe a que hay medios que dejan de existir al poco tiempo de su lanzamiento, mientras otros se “multiplican” en distintas iniciativas.
Un sistema mayoritariamente privado
Para conocer sobre la propiedad de los medios digitales de la provincia, desde el proyecto de investigación cuyos resultados presentamos en este sitio elaboramos un cuestionario que fue dirigido a personas propietarias o quienes ejercen la función de dirección del medio. En total obtuvimos 41 respuestas por parte de medios de distinto tamaño, alcance y ubicación geográfica.
De esos 41 medios, 33 son de propiedad privada, de los cuales 19 pertenecen a particulares (un único propietario o de tipo familiar), 10 están registrados como sociedades comerciales de distinto alcance y cuatro presentan otra forma (sociedad de hecho, emprendimiento informal).
En estas 41 respuestas encontramos también tres sitios web periodísticos que pertenecen a medios públicos (uno de Radio Nacional y dos a la Universidad Nacional de San Juan), un medio comunitario, tres de cooperativas y uno de una organización no gubernamental.
Las formas de financiamiento
Los medios digitales, como otros del sistema mediático, compiten por la atención de los públicos. Esta “economía de la atención” se traduce en métricas de tráfico, cantidad de páginas vistas, visitas del sitio, clics generados por la interactividad. El sostenimiento económico de los medios depende tanto de su capacidad de generar contenidos relevantes para las audiencias como de atraer anunciantes (públicos o privados). Un total de 41 medios digitales de San Juan (prácticamente la mitad de todos los registrados en 2022) respondió la consulta de este equipo de investigación sobre sus fuentes de financiamiento. A excepción de los medios públicos (los sitios de Radio Nacional y UNSJ), cuyo sostenimiento proviene del presupuesto nacional, casi todos los medios locales reciben pauta oficial e ingresos por publicidad privada.
En 17 de estos 41 medios de los que disponemos información, la publicidad oficial es de origen provincial y municipal; en 10 de estos medios a las anteriores se suma el aporte nacional, mientras que uno solo combina pauta nacional y provincial y otro nacional y municipal. Son 4 los medios que reciben solo de municipios. La contraprestación por este tipo de ingresos es, en su mayoría, a través de anuncios en el medio del tipo display, banners, formatos enriquecidos, pop-ups. Desde los medios consultados también informaron que, a cambio de la pauta realizan “publinotas” y coberturas de actos y anuncios oficiales. Hay un grupo menor de medios que traslada publicidad a otros medios propios.
Los medios que indicaron recibir publicidad privada, señalaron al sector comercial como el mayor aportante, y en menor medida, particulares (profesionales, funcionarios, partidos políticos, gremios, entre otros). La contraprestación es a través de publicidad digital en el medio y “publinotas”, según indicó la mayoría. También hay casos de pauta compartida entre más de un medio. Casi ningún sitio periodístico digital tiene ingresos por avisos o aportes de los sectores financiero o industrial.
En general, aunque en menor medida, estas dos mayores fuentes de ingresos (publicidad oficial y privada) aparecen combinadas con otras como el contenido patrocinado y la venta de espacios (13 de 41 medios), los subsidios o aportes no reintegrables por parte del estado nacional o provincial (7 de 41 medios), la donación (4/41) y los ingresos por lectores a través de suscripciones o membresías (3/41). No se registra diversificación a través de otras fuentes de ingresos que funcionen como alternativas de sostenimiento offline (como pueden ser la oferta de servicios, de talleres, de producción de contenidos o las estrategias de recaudación de fondos o crowdfunding).
Algunos medios establecen gestiones colaborativas entre sí, como del tipo visibilidad en los sitios web, promoción de las emisoras de radio en otras webs, así como traslado de pauta a programas de radio o televisión de medios no vinculados en la propiedad. Tejen “alianzas” entre sí, sin constituirse en multimedios. La consulta respondida por 41 medios locales indicó que 27 de ellos (66%) tiene relación con algún otro sector de la infocomunicación, mientras el 61% no comparte pauta publicitaria, contenidos o profesionales con otros medios o programas de radio o televisión.
Hay una predominancia de Google como plataforma monopólica de uso para la web, como plataforma publicitaria hacia dentro y fuera del sitio, de seguimiento y análisis de tráfico y como sistema agregador de noticias.
Los medios hiperlocales, cuyas redacciones se ubican fuera del Gran San Juan, no presentan un porcentaje mayor de pauta municipal, como cabría suponer, sino que esta se equipara a la que reciben del estado provincial.
Los medios nativos digitales podrían configurar un escenario plural, ya que son numerosos en relación a la población sanjuanina, pero presentan otras características que los hace depender de la pauta oficial para subsistir: son pocos los medios cooperativos, comunitarios o públicos; hay una amplia variedad en el tamaño y en su capacidad económica (existen desde emprendimientos informales a sociedades formalmente registradas). El rol de la pauta oficial provincial es central (muy por encima de otros sectores estatales), aun en medios sin fines de lucro. En general, esta dependencia casi absoluta de la publicidad oficial pone en riesgo la diversidad de opiniones, ideas, informaciones y puntos de vista para la vida democrática.
Las fuentes de información
A partir del análisis de sitios, así como entrevistas a periodistas y propietarios de medios digitales de San Juan observamos que las fuentes informativas consultadas por periodistas de estos medios son, en su gran mayoría, oficiales gubernamentales del ámbito provincial y municipal. El Poder Ejecutivo provincial cuenta con una agencia informativa oficial (SiSanJuan) que concentra y distribuye contenidos noticiosos (textos, fotografías, audios, videos) provenientes de todas las áreas estatales. Esos contenidos son reproducidos con escasas modificaciones por quienes elaboran contenidos en los medios digitales de San Juan. En el caso de las informaciones nacionales, los periodistas locales de medios en línea recurren a otros medios con esa cobertura o a la agencia pública Télam.
También usan otros medios digitales como fuentes, pero no siempre las citan.Algunos periodistas consultados indicaron que no usan las redes sociales como fuentes, pero sí como disparadoras de temáticas que luego abordan y desarrollan en el sitio del medio.Son pocos los periodistas que afirman que utilizan como fuentes a representantes de organizaciones sociales, asociaciones de la sociedad civil, especialistas o profesionales.
El vínculo entre los periodistas y las fuentes no es presencial (excepto algunos casos de medios hiperlocales en los que la cercanía facilita la cobertura directa de un hecho o el contacto directo con las fuentes). La mayoría de los periodistas reconoce que, en general, son las fuentes quienes los contactan a ellos y no al revés.
Como rasgo común, observamos escasez en la cantidad de fuentes consultadas y la consecuente falta de contrastación entre ellas. Esta situación podría ser resultado de una multiplicidad de factores que afectan a las modalidades de trabajo y a las rutinas de producción, y que nos pone en alerta sobre las consecuencias de un periodismo de menor calidad. En el contexto de la comunicación digital, la mayor posibilidad de acceso y consulta a fuentes remotas y de diversa procedencia, no necesariamente redunda en una mayor cantidad de fuentes consultadas, ni citadas.
Como ya señalamos, la mayoría de las informaciones proviene de fuentes gubernamentales, institucionales públicas o privadas de la provincia. Este fenómeno define un periodismo altamente institucionalizado en el que las fuentes oficiales ejercen el poder desde la autoridad institucional y la disponibilidad económica, lo cual se evidencia cuando analizamos la sostenibilidad de estos medios.
